miércoles, 25 de febrero de 2015

Máximas de San Martín explicadas por un turro.

Un día como hoy, 25 de febrero, pero de 1778, nació el Gral. José de San Martín. Sin duda uno de los personajes más emblemáticos de la Historia de este país. Tanto como Maradona, Nisman y/o el fan de Wanda.
En 1825, el general José de San Martín decidió escribir una serie de normas para dirigir la educación de su hija Merceditas: Las máximas de San Martín. En ellas se encuentran las virtudes civiles del Libertador. 
Aquí se puede advertir el amor y respeto hacia el prójimo que tenía nuestro Padre de la Patria. Sin duda, un ejemplo de buen tipo.
Debido a eso de que el que no quiere a su Patria no quiere a su madre, decidí hacer un profundo trabajo de investigación sobre el hecho y me encontré con uno de los mejores historiadores del condado.*
*Conocido como "El Braian", me enumera y explica los principales valores que el General San Martín inculcó en la población de su barrio privado (privado de luz, agua, gas natural y, sobre todo, privado de seguridad pública). A continuación se utilizará un lenguaje que, tal vez, resulte un poco insensible. Por favor, no intente arrancarse los ojos con una cuchara. Hemos omitido los abundantes errores de ortografía en el escrito enviado a nuestra producción por el Braian.

Máximas de José de San Martín para su hija Merceditas.

Inspirarle amor a la verdad y odio a la mentira.
- Hola ameo, mirá, hoy en día los que mienten son unos gato viteh. La otra vez me mintió el Yoni a mí vithe, y eso no tiene perdón. Yo le pregunté al Yoni qué onda con el faso que pegamos pero se hizo el gil y me dijo que lo habíamos fumado. Yo no soy rencoroso pero no me como ninguna viteh. Y yo se que el faso no lo fumamos todo así que a los traidores pum pum viteh.
Inspirarle gran confianza y amistad, pero uniendo el respeto.
- Yo no confío en nadie porque son todos re traidore viteh y de shepente te clavan un cuchillo en la espalda. A la única que le tengo respeto es a la Yaqui pero porque es amor lo nuestro viteh. Y aparte, la respeto una banda loco porque es la mujer que amo y ya le hice 4 hijos así que cobro los planes sociales viteh.
Estimular en Mercedes la caridad a los pobres.
- Esto habla de lo que son re careta viteh, mansa moneda y te refriega en la cara. Entonces, él nos estimula porque somos pobres y él pasa en un mercedes y le tenemo que tirar piedra viteh porque naa que ver cuál se está mandando.
Respeto hacia la propiedad ajena.
En mi barrio sí se respeta la propiedad ajena. Por eso, la respetamos tanto que nos hacemo ameos de lo ajeno vithe.
Acostumbrarla a guardar un secreto.
- Yo siempre guardo secreto viteh, porque no estoy ni ahí con los chismosos que te la quieren contar y no saben naa. Yo por eso ni cabida le doy a la gilada porque se mandan cualquiera algunos viteh.
Inspirarle sentimiento de respeto hacia todas las religiones.
- Yo a todas las religiones las respeto pero lo único que critico de los religiosos es que toman el vino puro en la misa y para mí tendría que ser con talca naranja y a veces con una pastillita de rivotril o algúnos alplax.
Que hable poco y lo preciso.
- Con migo siempre hablan poco porque cuando se zarpan los zarpo yo loco. Viteh que últimamente estan zarpados los wachines y avece te quieren zarpar el faso.
Acostumbrarla a estar formal en la mesa.
- En mi bashio, ameo, estamos acostumbrados a salir a la calle siempre con la mejor pilcha. A lo que muchos llaman la mesa, nosotros lo conocemos como choripan y vino en los actos políticos viteh,  y tratamos de estar lo más formal posible. Un turro como San Martín tenía estilo, y los negros del bashio también. Para tener estilo hay que vestirse con un jean zarpado, una remera de nylon-algodon con la cara de El Dipy comprada en el persa y unas altas yantas con colores verde-anaranjado flúor.
Amar el aseo y desprecio al lujo.
- El desprecio al lujo definitivamente no lo conozco porque no se lo que es lujo, pero no voy a amar al aseo porque sería puto y no estoy ni ahí con los putos viteh.
Inspirarla amor por la Patria y por la Libertad.
- En el barrio somos lo más patriotas que hay pero cuando juega la selesión naa más. Viva la patria ameo!



Con esto finalizo mi trabajo investigativo de la semana. Me comunican de la producción que el Braian se recibió de Ingeniero en Manyinaje y posee la licenciatura en contar historias.
Dice el Braian que el que no comenta es un gato traidor igual que el Yoni.
Buen fly!
Rolando Garros

jueves, 19 de febrero de 2015

Ser o no ser forro, esa es la cuestión

Hoy es un día normal como cualquier otro (dejando de lado el hecho de que me dejó mi novia, me quedé sin laburo y se me murió el perro). Pero más allá de eso, empecé a pensar: ¿Será que Dios no me quiere?? ¿o será que me merezco todas estas averías por lo forro que he sido con algunas personas?? Entonces me puse a pensar en la cantidad de veces que me he comportado como un verdadero hijo de múltiples padres...

Siempre van a existir esas situaciones en las que creemos que somos los tipos más forros del universo, pero no sabemos si lo somos o no. Dudamos de esto porque nos creemos buenos tipos los 365 días del año. Les voy a decir algo amigos: la próxima vez, no lo duden, porque sí son los más garcas. Y hay situaciones cotidianas que lo demuestran:

Hay veces que estamos en una fiesta en una casa, y vemos al pobre dueño de casa intentando limpiar mientras todos tiran las colillas de cigarrillos en la alfombra, ensucian platos y vasos, manchan las paredes con tragos, etc... Uno lo ve con cara de lástima y lo único que le decimos es "Después te ayudo a limpiar igual". Todos sabemos que nadie lo ayudó a limpiar durante toda la noche. Vos dijiste eso como para quedar bien con el anfitrión. Pero también te diste cuenta que él, mientras limpiaba, anheló profundamente que se te caiga el pito, que la mina que te acababas de levantar sea un travesti y que el trago que estabas tomando tenga ají puta parió en todo el borde del vaso. Y te lo demostró con la mirada. Es ahí cuando te diste cuenta que fuiste como el papel araña: el verdadero y más conocido forro.



Otros que son forros son los que nos atienden el teléfono cuando llamamos para quejarnos de lo que sea y te clavan el tono de espera. Es como que te claven el visto en wasap. No hay nada peor. Si trabajas en una empresa que sabés que estafa a la gente, ¿cómo haces para no sentirte un hijo de puta?? Tenés que entender que si trabajás para forros, sos forro. Yo me imagino una reunión con mis amigos todos hablando y de repente:
- te llamé pero no me dio tono
- es que el teléfono se corta siempre en Claro...
- aahh noo, olvidate, los de Claro son unos hijos de puta, siempre lo mismo.
*¿como les digo a mis amigos??*
-che, conseguí laburo en Claro pero yo no soy tan hijo de puta. (¿O sí??)



O estás hablando con alguien y están tipo...
- Y a qué te estás dedicando??
- Meto caño en bancos y blindados, estafo gente, les meto el cuento del tio a los viejitos... Vos?
- Yo laburo en Speedy.
- AHH VOS SÍ QUE SOS UN HIJO DE PUTA...

(?)

Los que son más garcas que los ya nombrados, son los que venden cosas por catálogos. Me he dado cuenta de la debilidad de las mujeres cuando las ponen al frente de un catálogo, no importa de qué. Si está en un catálogo, te compran hasta el aire, que es gratis. De hecho, tengo la teoría de que así comenzaron a venderse los palitos para sacar selfies (?). Si saben que eso no se vende, ¿por qué lo ponen en un catálogo? Se aprovechan de la debilidad de las féminas. Eso es de forro. Avon, Amodil y todos esos son FORROS. Pero no cualquier forro, sino ese forro que siempre se elegía el Mario y te dejaba a vos el Luigi. Esos eran los peores.

Bueno, en fin, la moraleja de esta nota es que todos tenemos un poquito de maldad en el alma. Solamente que no nos habíamos dado cuenta. Espero que me sepan entender.

Otra manera de ser un cabeza de capucha de latex, hijo de una camionada de suripantas, sería no comentando. El que no comenta no hace palmas, y el que no hace palmas es un gato. No seas gato y comentá.
Buen fly!
Rolando Garros.


martes, 10 de febrero de 2015

Tanta cara de boludo, te estás pareciendo a mí...♪

Yo soy un tipo tímido. Bah. No es que sea tímido, sino más bien, vergonzoso. Lo que pasa es que intento evitar los momentos de mierda.
Cuando digo momentos de mierda me refiero a esos momentos en los que te queda una cara de pelotudo más evidente que el asesinato de Nisman. Hay algunas situaciones de mierda que hacen que me ponga colorado como huevo recién rascado. Por ejemplo, cuando vas por la calle y saludas a alguien que pensás que te está saludando a vos y no es así. Ves que alguien te saluda, lo saludas, y de repente te das cuenta que ese alguien saludó a uno que estaba detrás de vos, y no a vos. Es así, te hacés el boludo y seguís caminando. Pero mientras te vas mirando para abajo, sabes que ese tal alguien (que pensabas que conocías) se está cagando de risa de vos. Se te puede ver la cara de pelotudo desde Google Earth.
Peor es cuando vas en la calle y ves a una mina que se le escapa una goma y no se da cuenta. ¿Cómo le decís que se le escapó la teta sin quedar como un baboso?¡Es imposible!! Si te diste cuenta de eso es porque le estabas mirando las tetas, ¡pillín!!. Lo único que te queda es la cara de baboso y, por ende, viene acompañada de la cara de pelotudo.



Algo horrible, pero muy horrible, es cuando te pregunta algo un desconocido, y uno solito se genera la obligación social de responderle rápido. No hay problema en hacer una pausa y responderle tranquilamente. Pero yo me pongo nervioso y empiezo a pensar y querer responder al mismo tiempo, porque tengo que brindar el dato rápido. Entonces, cuando algún desconocido me pregunta la hora o dónde está la calle Catamarca (?), lo único que logro es balbucear en un intento de respuesta lo más rápida posible. Lo único que piensa el interrogador es "justo le vengo a preguntar al más pelotudo del condado". Y sí, campeón, la mayoría somos así. Quedamos como unos boludos. Al igual que cuando mentimos y nos descubren. Porque todos sabemos que la mentira tiene patas cortas, pero no nos importa y nos arriesgamos a que nos enganchen.

- Mi amor, ¿cómo me queda este vestido?
- Divino, gorda, te queda divino...
- Seguro? ¿No me marca mucho este rollito??
*ahí es cuando tenés que jugar con fuego, sabés que sí le marca el rollito, pero recién le dijiste que le queda divino. Si cambiás de opinión preparate para afrontar el escándalo con la cara de boludo más grande de tu vida. Entonces respondés...*
- No mi amor, te queda divino! 
*pero en tu cara no pudiste disimular la mentira*
- Mentiroso hijo de puta, te odio, tontoculiado!
*se enoja*
*no coges por boludo*




Bueno, en fin, la moraleja es que no tenemos problemas con la timidez, ni con la vergüenza. Sino que, el verdadero problema es con los momentos de mierda en los que quedamos como los pelotudos más grandes del universo. Pelotudo de ida y vuelta hasta el infinito punto rojo. Porque eso es típico del tipo canchero que nos creemos ser, ese que se la sabe todas. No hay peor cosa que quedar como un boludo. Pero espero que me crean cuando les digo que siempre va a ser así. Vivimos en un país en el que todo el mundo piensa que uno es más boludo que otro.

(La mamá del que no comenta es mi novia)
Buen fly!
Rolando Garros.